Como ayuda el ERP a cumplir con las obligaciones fiscales.

Hoy en día existen sistemas y software ERP Avanzados que funcionan como una buena herramienta para ser utilizadas en las actividades de contabilidad electrónica. Al final, las ventajas de este tipo de sistemas ERP, no sólo abarcan este tipo de actividades. Sino que se extiende a todas las operaciones y procesos del negocio, todo integrado lo que hace que aumente su productividad.

En este sentido, un sistema ERP o Enterprise Resource Planning, (Planificación de Recursos Empresariales), es ideal para que una empresa cumpla con sus requisitos fiscales. Este tipo de herramienta virtual tiene elementos contables: el catalogo de cuentas, la balanza de comprobación y las pólizas contable. Además, una de sus mejores características, es que la empresa puede contar con toda la información en tiempo real, lo que ayuda a la mejor toma de decisiones.

La empresa tiene que cumplir con todos los requisitos fiscales impuestos por el Servicio de Administración Tributaria (SAT). En este sentido, algunos de los requisitos que el SAT pide, es la validación de las facturas recibidas, así como generar y configurar archivos XML, entre otros.

Es por eso que tener un sistema dentro de tu empresa que cubra todas las áreas de tu negocio, con reglas de negocios y análisis gerenciales que te ayude a realizar estas tareas de manera rápida, eficiente; pero sobre todo confiable, es buena opción. El objetivo es estar seguro que lo realizado cumple con todo lo necesario y que no tendrás problemas.

El ERP y su ayuda para cumplir con sus obligaciones fiscales.

El no contar con un sistema ERP puede traerte atrasos; además, sólo disponer de las herramientas que el SAT ofrece en su portal puede traerte errores. Ya que esto quiere decir que se hace la captura a mano de la comprobación fiscal, así como de los demás documentos, no dependiendo de interfaces complejas entre módulos, que garantiza total seguridad de tu información.

Lo anterior vuelve la tarea tardada, invirtiendo mucho tiempo en analizar los documentos y haciendo los ajustes necesarios para limpiar la información que sobra. Todo esto lleva un esfuerzo innecesario. Además, los gastos pueden aumentar, por contar con un software arcaico en contraposición a lo nuevo en el mercado.

Por otro lado, una empresa que ha implementado un sistema ERP, va a obtener ventajas. Ya que esta toma la misma información de las secciones, las registra y realiza la contabilidad electrónica de acuerdo a los parámetros que indica el SAT.

Así se le envía a la institución tributaria la información que solicita. Además, la empresa aprovecha la información arrojada para su análisis, y posterior utilización en la toma de decisiones. La información, que se refiere a todo el sistema es registrada y almacenada.

Asimismo, el ERP disminuye las tareas, pues él se encarga de almacenar y capturar los datos. Por lo que disminuye el tiempo invertido, así como los gastos; sin mencionar, que los esfuerzos para realizar las tareas también disminuyen notablemente.

Finalmente, la adquisición de un ERP se ajusta a la manera de trabajar de la empresa; además, debido a sus constantes actualizaciones el sistema seguirá siendo viable y funcional, al momento de enfrentarse a los cambios de las reformas fiscales.

Si desde el inicio el ERP se implementa de la manera correcta no deberá de haber problemas para que sea una herramienta útil y cumpla con las obligaciones fiscales.